LA ADMINISTRACIÓN EN MESOPOTAMIA




Mesopotamia recibió en la antigüedad el nombre de Sumeria. Los pueblos sumerios fueron invadidos por los acadios y asirios, de raza semita, quienes llegaron como conquistadores se quedaron allí adoptando la civilización Sumeria enriqueciéndola con sus conocimientos de matemáticas, medicina, astronomía, arquitectura y escultura

En Mesopotamia, eran escasas las lluvias. Por eso allí se aprovecharon las inundaciones de los ríos para la agricultura. Como los ríos se desbordaban en el Valle de Mesopotamia, este fenómeno exigió una adecuada planificación de las actividades del país.

La agricultura ocupó un lugar destacado por la fertilidad de los valles cercanos al golfo. Las industrias ganaderas ocupaban gran parte de la población. Aunque el Estado regulaba la tenencia de las tierras y demás actividades agropecuarias, su función administrativa no fue tan minuciosa y centralizada como en Egipto.

Los habitantes en Mesopotamia legaron a la humanidad invenciones importantes. Una de esas fue la escritura que con el correr del tiempo se convirtió en la base del progreso de ese país. Con la escritura los sumerios adoptaron un sistema para registrar sus transacciones comerciales.

Los acadios y los asirios al mezclarse con los sumerios, dieron origen a un pueblo pujante, especialmente en asuntos comerciales. La organización política y administrativa alcanzó un alto nivel de evolución. Uno de los reyes más antiguos, llamado Sulgi, antes de la llegada de los semitas, había compilado un Código de Derecho Civil y Comercial en donde ya se hablaba de documentos comerciales como la letra de cambio, el endoso y el traspaso de obligaciones.

Una de las diferencias fundamentales entre las ciudades mesopotámicas y las egipcias consistía en que en Mesopotamia el poder estatal no estaba completamente centralizado, sino bajo el mando de muchos gobernantes dispersos a lo largo del territorio, pero no más poderosos que el rey; mientras que, en Egipto, el Faraón tenía mando absoluto sobre sus tierras. Durante mucho tiempo Mesopotamia, para el rey era imposible ejercer un mando directo sobre todo su territorio, así que designaba gobernantes menores para que a su vez fueran representantes de su poder real y mantuvieran el orden político y comercial. Bajo el mando del rey también se encontraban muchas otras clases sociales como los nobles –reconocidos por las grandes sumas de dinero que lograban acumular en los negocios–, los cultivadores de la tierra que tenían un nivel de vida muy bajo, y los hombres esclavos al servicio de un señor.



 



Al igual que ocurrió en Egipto, la organización social de la civilización mesopotámica permitió el desarrollo de proyectos arquitectónicos de gran calado en muchas ciudades. El surgimiento de la escritura, un hecho que cambiaría la historia del hombre, trajo a esta cultura la posibilidad de guardar, organizar, revisar y multiplicar información; asunto que tuvo grandes repercusiones en la realización no solo de estos proyectos arquitectónicos, sino también de un comercio expandido por grandes zonas aledañas a los territorios de Mesopotamia e inclusive, tierras lejanas.


FEBRERO     1/2